Obligados por el Decreto sobre Horario Uniforme de 1966, la mayoría de los estadounidenses adelantaron este fin de semana sus relojes al llegar el Horario de Verano el domingo a las 2 am.
Pero mucha gente considera que es hora de dejar en paz al tiempo. Desde Nueva Inglaterra hasta la Costa Oeste, las legislaturas estatales –incluyendo la de Nuevo México, donde se debaten dos proyectos diferentes al respecto– están analizando propuestas para cesar de adelantar el reloj, poniendo fin a la confusión sobre las horas perdidas o ganadas y los problemas que acarrea.